Select Page

Repetir esa emoción irrepetible y fugaz

La fabulosa historia de los inolvidables Marrapodi

No es justo hacer una crítica de esta obra. Estamos hablando de uno de los clásicos del teatro nacional, lectura obligatoria en la universidad de teatro y una de mis obras de teatro favoritas. Y digo que no es justo también en este caso porque el elenco de Los Rompecocos dejan la vara demasiado alta.

Paso a contar un poco de qué se trata, casi de memoria. La fabulosa historia de los inolvidables Marrapodi, parte de la premisa de contar la historia del teatro nacional desde la visión de una sola familia, como si esa familia fuera la que inventó todos los géneros teatrales del país. En el medio hay clarísimas referencias a la familia Podestá (familia que estuvo presente y marcó la base de los orígenes del teatro rioplatense), a Vaccarezza, a los hermanos Discépolo, Tita Merello, Tito Cossa, Gorostiza, Gambaro, etcétera… en fin, las grandes figuras del teatro porteño.

Y aun siendo una obra muy porteña (lo cual habla también del centralismo que hay todavía hoy en el país) es un elenco 100 % mendocino el que la hizo y con una calidad interpretativa que destaca por su calidad. Estoy hablando de cuatro intérpretes de las tablas que se mueven con soltura en cualquier género que les propone la obra sumándole baile, canto, instrumentos, y juego escénico que demuestra que no sólo se llevan bien frente al público sino en la intimidad de los ensayos, explorando el texto junto con la directora pero también la capacidad que tienen como artistas. Eso es lo que se ve en escena: artistas jugando y haciéndole honor a un texto clásico. Y esto no es poco, sobre todo si presentan la obra para un público estudiantil, como fue este caso. En esta ocasión no fui como crítico sino como profesor de teatro y llevé a 22 de mis estudiantes a disfrutar de la función, siendo la primera vez que iban al teatro muchxs de ellxs. O sea que la primera experiencia teatral de todo este grupo de adolescentes (y del 70% de capacidad que tenía el Teatro Plaza ese día). Sin presiones, no?

Lo que hizo el grupo comandado por Lila Medina en la dirección es un placer de ver, un ejemplo de cómo trabajar un texto conocidísimo por la gente del ambiente y hacerlo de una manera amena y disfrutable, apropiándose de las escenas para darles un toque único y más actual (teniendo en cuenta que la obra originalmente es de 1998 por el grupo Los Macocos, algo así como los Les Luthiers del teatro).

Es cierto que la obra no mantiene la misma energía en todo momento y que puede resultar un poco agotadora para un público que no acostumbra ir al teatro y estar con el celular todo el día, pero ahí no puedo señalar a Los Rompecocos como lxs responsables de esto. Me alegra que en este caso formen parte del EPA! (Encuentro de Públicos y Audiencias) y nos inviten no sólo a ver la obra a precio popular sino a quedarse charlando con adolescentes sobre su proceso o lo que quisieran preguntar, para mostrar que lxs artistas somos personas y no sólo intérpretes arriba de un escenario. [Sobre esto último resalto que varios de los miembros del elenco empezaron a interesarse en el teatro cuando estaban en la secundaria, por iniciativa de las escuelas, lo cual me abre una luz de esperanza y motiva para seguir haciendo lo que hago. Gracias por este mimo al alma].

¿Cuándo la volverán a hacer? No lo sé, pero recuerden que la vienen haciendo desde el 2016 y que son cuatro intérpretes y una directora muy consagradxs en el ámbito local. Un clásico por donde se lo mire.

Elenco: Los RompeCocos teatro

-Luisina Gonzalez

-Deivid Laguna

-Martín Ferreyra

-Mauro Ferrari

Dirección: Lila Medina

Escrito por Abel Lisman

Actor, Profesor Nacional de Teatro (COSATYC Andamio '90), asistente de escena del teatro de Andamio entre los años 2010 y 2012; colaborador en diversas obras teatrales de Buenos Aires y Mendoza; escritor de un libro sobre pedagogía ("Pedagogía Incendaria. La escuela tiene los días contados"). Crítico teatral de la revista "Palabras Macabras" (2018) y del Diario El Sol (2023).

0 Comments

Submit a Comment

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *